El bueno de Frank
Este cuadro lo pinté para mi amigo Sergi Puertas que vive en Barcelona. Eran otras épocas. Uno podía darse el lujo de enviarle cuadros a los amigos. Ahora ya no se puede ni siquiera pintar.
Me duele la garganta. Me duele tanto que tengo ganas de que me la extirpen.