16.3.03

Conocí a un tipo que pasó controles de alcoholemia

Hay dos tazas de café que se enfrían esperando labios sorbedores.
Y dos o tres amores que aullan melodías que no se entienden
(y que nadie puede entender en un conjunto adonde sólo hay
unos pocos conceptos que demuestran unas cosas diferentes, tan fríamente estúpidas como la naturaleza)