La cuestión es que en esa reunión "histórica" que nada tuvo que envidiarle a la reunión de Guayaquil o la de Yatasto, él (a quién nombraremos "histórico 2" (H2)) y yo (a quién llamaremos "histórica 1"(H1), porque soy dama y las damas primero y porque llevo un poco más de tiempo "histórico" en la blogosphère) abordamos temas de gran trascendencia para la "historia" misma de la blogposteridad.
Uno de los profundos diálogos que surgieron será transcripto de manera más o menos fiel como para que todos ustedes puedan comprender el alcance que una reunión de "históricos" puede tener y de la verdadera importancia que conlleva esta labor que llevamos a cabo en po(u)st de una sociedad mejor, una cultura abarcativa, globalizada y democrática y una manera digna y loable de vivir.
H1: - Yo llevo 5 años blogueando (cumplí en febrero) y la verdad es que estoy re podrida.
H2: - Yo creo que voy por los cuatro y siempre me cuestiono cuándo será el momento de largar.
H1 - Yo también. Creo que me lo vengo preguntando desde la primer semana.
H2: - ¿Hasta cuándo vamos a seguir con esta pavada? Nos imagino dentro de unos años, viejos y todavía posteando.
H1: - Yo también. Es cansado, pero de ninguna manera me permitiré el papelón de abandonar para después morirme por volver. Esto es adictivo y sé que si lo dejo voy a sufrir.
H2: - Es verdad. Hay días en los que me propongo no hacerlo y veo algo que me llama la atención y, es como un acto reflejo, ya lo estoy posteando.
H1: - Sep. Es una cruz.
MOZO. - ¿Qué se van a servir?
H1 - Un capuchino a la italiana.
H2: - Yo un whisky.
H1: - Bueno, ya hablamos bastante, ¿ahora qué hacemos?
H2: - No sé... a ver... acá a la vuelta hay un telo.
H1: - ¡Joya! ¿Trajiste la laptot? ¿Tendrá wirless?
H2: - Creo que no, pero te dan jabones y champú.
H1: - Y bueno, dale, hagamos algo diferente. Total es un rato...
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