12.8.04

Un gesto amable

Andrés Zarich era hacker de electrodomésticos. Habitualmente se lo veía colgado del radar de Direct Tivi, intentando desde allí dominar todas las máquinas del mundo.
Nunca le salía, pero él insistía.
Un día logró hackear un microondas y pudo cambiar el programa de descongelado rápido por otro de simulación de vuelo. A partir de ese momento los guisos comenzaron a volar por el aire y a moverse con mucho donaire.
Cuando los dueños de BGH quick chef lo descubrieron le hicieron juicio por mala praxis.
Andrés nunca más intentó hackear nada.
Eso fue una verdadera pena.