3.6.03

Su pedido se encuentra en el bar (poema dedicado)

A Luisito allanado

Mientras la ciudad te devora los ojos
y no encontrás alfombra que pisar
ni balcón que te cobije de las sombras
Yo estoy aquí, enfocando directo
a aquello que imagino, tratando
de dibujarte una calle sin serpientes,
una vereda sin piedras caníbales de suelas,
sin vientos asesinos, ni lluvias indigentes.

A veces, sucede que no podemos respirar.
A veces duelen hasta las sonrisas.
Sin embargo, mientras vas por el costado,
yo sé que es a mi lado y que la pena
es sólo un rato en el que igual te estoy buscando,
como siempre, como mientras estás lejos
y la luz es un delay casi infinito
y el cansancio no se cura en frigobares,
ni entre sábanas que sepan a delito.

Mientras vas oliendo tiempos de homeless
y la puerta está cerrada con franjas de clausura
Yo acontramaneo con esmailis telefónicos
Dibujo sueños que sean estaciones de servicio
Ensayo nuevas maneras de quererte,
Invento un mundo que no sirva para nada
y sigo aquí, muriéndome por verte.