3.4.03

Informe sobre ciegos

Hoy conocí a una señora que se llama Marianela. Inmediatamente me dieron ganas de llorar, como cuando leí el libro de Benito Pérez Galdós en la secundaria.
Sí, es cierto que en la secundaria ya era bastante pelotuda. Siempre me conmovieron las historias de amor y, si encima había un ciego de por medio, aún más.
Eso me pasó hasta que conocí a Grecia Colmenares. Ahí sí que fue distinto.

Siempre pensé que el sentido más importante es el de la vista.
Los ciegos me hacen llorar. aunque ambas Marianelas no sean ciegas y tengan problemas distintos.
Eso de que 'el amor es ciego', es puramente cierto.
Y también que hace llorar.